
Escuela de Bufón ¿Por qué usamos el Bufón?
El bufón es el comediante incómodo, ese ser deforme, feo, horripilante, casi fuera del espectro humano, perteneciente a los suburbios/catacumbas de la sociedad. Y por ello, el único que puede permitirse la libertad expresiva de la irreverencia ante el Rey. Eso sí, siempre a riesgo de que»le corten la cabeza”.
Nos muestra y facilita:
Re-sintonizar con El placer de la irreverencia.
Nos invita a recuperar nuestra capacidad satírica para denunciar, reclamar, punzar; reivindicando nuestro derecho a existir como animales deformes, libres y gozosos.
Recuperar la rabia creativa como fuerza de transformación y pertenencia, en busca de la toma de consciencia con respecto a nuestra dualidad ternura/agresividad.
La re-apropiación de nuestras energías instintivas relacionadas con nuestra propia agresividad, con nuestra inmensa creatividad animalesca/infantil castrada por el sistema socio-familiar patriarcal dominante, para encontrar una nueva pertenencia de nuestras partes deformes, excluidas y vilipendiadas.
Volver al gozo de mi existencia deforme y animal.
Nos permite una investigación de nuestra anatomía energética desde la deformidad, desde la de construcción de nuestras heridas, buscando otro estar en el cuerpo, otro esquema de belleza fuera de los cánones patriarcales, que nos catapulte de manera directa al disfrute, desparrame y éxtasis corporal animal.
Abrazar el espíritu de la jauría
El espíritu gregario de la manada de bufones, al grupo de los excluidos, como una vía hacia la autodeterminación y auto-pertenencia a mi parte socialmente denigrada, no adaptada y grotesca.
El caer y abandono propio instintivo/animal Consiguiendo la calma y el descanso nutritivo de mi cuerpo grotesco, que se da la licencia para caer, rodeado de la masa deforme, maloliente y asquerosa de la jauría animal, representada por el Coro de Bufones.
Necesidad de Existir
La liberación de nuestra energía animal a través de un alarido justiciero y burlón, que nos pone en el juego creativo aprovechando de las inmensas energías que afloran de la rabiosa necesidad de existir.